Cinco lecciones de vida para enseñarles a sus hijos sobre la administración del dinero
¿Recuerda cuando sus padres le decían que «el dinero no lo regalan» o «no te lo gastes todo»?
Pues, ahora, como padre, madre, abuelo o abuela, es hora de que cumpla con su deber y le dé a sus hijos y a sus nietos algunos consejos que les ayuden a orientarse en el mundo del dinero.
Estos cinco consejos financieros pueden servir a las próximas generaciones.
1. Ahorre para épocas difíciles
Si hay algo que la pandemia nos ha enseñado es que estar preparados para «cualquier cosa» es algo que nos habría venido bien a muchos.
Según un estudio reciente de Fidelity, el período de la pandemia fue especialmente difícil para los jóvenes, por lo que es muy probable que los jóvenes adultos estén preocupados por su situación financiera debido al COVID-19.
Los jóvenes que hoy en día están en edad escolar necesitan saber de la importancia de reservar algo de dinero para épocas más difíciles. Ninguno de nosotros sabe qué nos deparará la vida, y mucho menos en lo referente a las finanzas, por lo que siempre vale la pena contar con ahorros a los cuales podamos recurrir.
2. No espere que se lo pongan todo en bandeja
Según donde viva y si su país de residencia tiene pensión estatal, puede verse afectado por cambios constantes en la legislación. Para poder tener estabilidad financiera más adelante, es importante aportar dinero adicional al que el Gobierno le proporciona para cubrir cualquier imprevisto.
3. Todo suma
Es importante ser consciente de cómo suman todos los pequeños gastos de nuestra vida diaria. La bebida de marca de todos los días, la revista que llega cada mes al buzón y todos los pequeños «lujos» que nos permitimos pueden sumar cantidades de dinero sorprendentes. Si cualquiera de nosotros llevara un control de en qué gastamos cada cantidad aparentemente insignificante durante un mes, es probable que nos sorprendiéramos de cuánto dinero desperdiciamos o gastamos en cosas innecesarias. Las pequeñas cantidades realmente suman, y reducir esos gastos diminutos marca una gran diferencia a largo plazo.
4. Aproveche el día
Nunca es mal momento para ahorrar algo de dinero. Si su hijo cree que no puede ahorrar, dígale que lo piense bien. Si piensa que es demasiado joven para comenzar a aportar a una pensión, dígale que nunca se es demasiado joven para comenzar a ahorrar para la jubilación.
De hecho, en lo que al desarrollo de estabilidad financiera respecta, el tiempo está de su lado y sin lugar a dudas está del lado de las generaciones más jóvenes. Cuanto antes empiece a ahorrar, incluso cantidades muy pequeñas, más probabilidad tendrá de que su dinero aumente con el tiempo.
5. Cuide de las monedas
Si bien ya no se pueden comprar tantas cosas como antes con monedas, guárdelas y pronto podrá juntar una cantidad considerable de dinero.
Enséñeles a sus hijos a crear hábitos de ahorro y verán lo rápido que esas monedas pueden convertirse en algo más sustancial. Anímelos a establecer una orden permanente que se deduzca de su cuenta bancaria cada vez que cobren. No es necesario que sea mucho, y con el tiempo apenas se darán cuenta, pero terminará por sumar una cantidad importante gracias al poder de la capitalización compuesta.
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